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Investigadores españoles descubren que los votantes del PP padecen una reducción de la disonancia cognitiva

A día de hoy el Partido Popular ostenta el indecoroso récord de estar investigado, por tener más de 31 grupos mafiosos, con más de 500 dirigentes imputados y centenares de casos de corrupción prescritos. Para asombro de los decentes, las encuestas electorales vaticinan un 30% de votos para el PP, lo que convertiría a este partido, en la opción más votada en las próximas elecciones del 26 J. 

No está claro si el Partido Popular se fundó con animo de crear solo un partido político o, como diría el juez de la Mata, se fundó para crear una "organización criminal" que saquease las arcas públicas del Estado. 

Para algunos expertos, el secreto de ese voto cautivo del 30% podría estar relacionado con un desorden psicológico, que conlleva una notable reducción de la disonancia cognitiva.

Muchas investigaciones tratan de averiguar por qué hay un 30% de españoles que pasan por alto la corrupción política que ha arruinado a España y ha destrozado a las clases medias.

Las excusas que ponen los votantes del PP para volver a votar a los ladrones, pasan por: "los medios mienten" o "mejor así que con el coletas, el guapete o el cuñado".
"Argumentos que apestan a rancio, contra los que la coherencia no puede más que claudicar".

Ahora varios investigadores, académicos y sociólogos entre los que están Martin Seligman o Jordi Muñoz, profesor de Ciencia Política en la UAB, han analizado detenidamente el grave problema del comportamiento surrealista de los votantes del PP.

El problema del voto cautivo del PP

El votante del PP nunca falla. No vamos a analizar a los votantes inducidos, que transportan las monjas hasta el colegio electoral con la papeleta en la boca.

Al votante cautivo le da igual que su PP de Rajoy, haya robado hasta el punto de hacer desaparecer en la miseria a la clase media, que su sede esté pagada con dinero negro, que sus dirigentes tengan cuentas en paraísos fiscales, o si se han gastado el dinero de la caja de pensiones y tampoco le importa que la mayoría de sus miembros estén imputados o en sospecha de poder estarlo muy pronto. 

Ellos, con un pin paramilitar en su chaqueta y un marcado odio irracional hacia el progresismo, siempre votarán al mismo partido. 

Es una decisión emocional que poco tiene que ver con el razonamiento, la reflexión y la coherencia.

Existe una Disonancia Cognitiva en los votantes del PP

La cautividad del voto está provocada por un desorden psicológico, que causa una notable reducción de la disonancia cognitiva, un término que alude a la incoherencia del sistema de ideas, creencias y emociones.

1º.- El votante del Partido Popular vota al PP, porque es "lo que ha hecho toda la vida", "porque al fin y al cabo todos son iguales" y "porque si gobierna el de la coleta se marcha de España".
2º.-  Por otro lado un aluvión de noticias le recalcan a diario que "los dirigentes del PP son una pandilla de corruptos" y que están implicados en múltiples grupos mafiosos.

Al recabar estos datos, el cerebro del votante del PP,  entran en un grave conflicto y provoca un sesgo cognitivo cuyo desenlace impacta directamente sobre la actitud que adopta ante el dilema.

Es una especie de 'cortocircuito cerebral' y cuando esto ocurre, el votante recurre a una frase aprendida y sin sentido. repetida por todos los corruptos del PP: "y vosotros más".

La Disonancia Cognitiva produce agresividad

Veamos a continuación un ejemplo de disonancia cognitiva:

-Tras conseguir el valor necesario, un ciudadano se dirige directamente a un vocal del partido de los populares para pedir explicaciones sobre las tramas de corrupción que afectan a la afiliación. A pesar de hacerlo educadamente y con una actitud completamente democrática, los simpatizantes del Partido Popular se indignan e intentar detener la exposición bajo descalificaciones y argumentos tales como "¿Y los ERES de Andalucía, qué?".-

Esta peligrosa merma cognitiva provoca que aquellos que se identifican con la ideología del Partido Popular: "permanezcan impasibles, como estatuas, frente a las miles de acusaciones de corrupción dirigidas contra los políticos que apoyan".

Es algo difícil de comprender, ya que se trata de la misma gente que con toda probabilidad, criticaría y trataría de evitar situaciones como que una persona pilote un avión de pasajeros o conduzca un autobús escolar con un par de copas de más.

Lo grave de este asunto no es que existan casos de saqueo en nuestro país, lo grave es que cuando los dirigentes que fundaron el PP, empezaron a robar dinero público, ninguno de sus compañeros ni los partidos que estaban en el Gobierno, tomaron medidas y los ladrones se han organizado en grupos mafiosos y se han multiplicado como las chinches.

¿Son los votantes del PP cómplices de la corrupción del partido?

Evidentemente, sí, ellos son los cómplices necesarios para que el PP tenga el poder y el Gobierno, para continuar robando.

Y nos seguirán robando y desviando sus miles de millones estafados a Suiza, Gibraltar, las Caimán o Panamá, mientras presumen de patriotismo luciendo una pulsera rojigualda del Todo a Cien.

Quizá algún día los libros de historia cuenten con asombro, cómo en el siglo XXI, en España, una organización criminal tomó el control del gobierno porque el 30% de los electores del país, así lo quisieron y el resto de formaciones políticas, no hicieron nada para evitarlo.

O quizá no. Todo depende de ti, de lo que votes, piensa en el futuro de todos y el de tus nietos, cuando los tengas.

Artículo recomendado ¿Son los votantes del PP cómplices de la corrupción del partido? por AURORA FERRER de El Plural