El tripartito PP, PSOE y Ciudadanos reniegan de Podemos y sus votantes
El tripartito para que todo siga igual (PP, PSOE y Ciudadanos) aparta a Podemos, la tercera fuerza en número de votos del parlamento, de la mesa de la Diputación Permanente del Gobierno.
Mariano Rajoy, el jefe del partido de la corrupción, está muy orgulloso de todo lo que han hecho su Ministro Soria, su Alcaldesa Barberá, su presidente balear corrupto Matas, su lotero castellonés Fabra, su bankero Rato y el resto de indecentes de su partido. Rajoy los mantiene en libertad por amistad y para que no "canten".
El PSOE de Pedro Sánchez continúa poniendo zancadillas a la posibilidad de acuerdo para formar un Gobierno de cámbio. Mientras, él culpabiliza a los partidos del cámbio, de no querer pactar con él.
Ahora se alínea con el partido podrido y Ciudadanos para dar de lado a Podemos e impedir que forme parte de la Diputación Permanente.
Los dos partidos políticos que han connivido y permitido la corrupción general de las instituciones y el saqueo generalizado por parte de los amiguetes, se autoproclaman defensores de una patria que ellos solitos han reventado.
Son unos caraduras, cínicos, tuertos del ojo izquierdo que sólo saben defender y excusar puerilmente a sus delincuentes afiliados, con no se qué valores patrióticos.
Tanto el Partido Popular, como el PSOE son formaciones políticas envenenadas, podridas, que solo saben hacer lo que han hecho en Madrid, Valencia, Granada o Andalucía. Sus políticas no han evitado la corrupción, ni el desempleo, ni los desahucios ni el abandono de los parados que agotaron la prestación. Ambos partidos solo han protegido los intereses económicos de los que ya tienen todo y no necesitan que nadie les defienda ni proteja.
Ignorar y renegar de los ciudadanos que han elegido democráticamente a partidos de izquierda (Podemos 5.130.283 de votos a Izquierda Unida con 923.133 votos o a Esquerra Republicana de Catalunya 599.289 votos) no tiene excusa alguna, menos aún, si el partido que los repudia se autodenomina Socialista.
Aunque Pedro Sánchez se esfuerce en culpabilizar a estos electores que han entendido que votar al PSOE, PP o Ciudadanos es una pérdida de tiempo, todos hemos visto con sorpresa como ha pactado con la formación naranja, el partido clonado, en lugar de hacerlo con los verdaderos defensores del cámbio.
El PSOE con 5.530.779 votos, podría haber gobernado en mayoría absoluta junto con los partidos de izquierdas anteriormente citados, pero ha preferido pactar un gobierno del paripé, un gobierno idéntico al de Rajoy, desean hacer un lavado de cara superficial para que nada importante cambie, un pacto maquiavélico con el exbanquero y niño pijo Albert Rivera, un pacto con el partido del recambio, que desde el principio se sabía innecesario y burlesco.
Pedro Sánchez y Albert Rivera pueden pregonar lo que quieran, pero no van a engañar a nadie, porque ahora todos los españoles sabemos la verdad. Ellos no van a parar los desahucios, no van a implantar una renta mínima de inserción para los que han perdido todo, no van a subir los impuestos a los que más tienen, los dos han aceptado el tratado de Libre Comercio Norteamericano y ni siquiera han pedido la ilegalización de un PP declarado Organización Criminal por la justicia.
El PSOE dejó de ser socialista desde hace mucho tiempo, los corruptos del PSOE no son mejores que los corruptos del Partido Popular, de hecho viven en los mismos barrios residenciales, con vallas y seguridad privada, para sentirse aislados y seguros contra la "ciudadanía malvada y comunista" que malvive miserablemente mientras les pagan sus salarios públicos.
El coste de 200 millones de euros de unas nuevas Elecciones Generales, más los gastos de campaña respectivos son unos lujos que los españoles decentes y endeudados no podemos permitirnos.
A Pedro Sánchez le da lo mismo, o gobiena con Ciudadanos o no hay nada de que hablar con el resto de formaciones. Este es el verdadero talante del actual PSOE de Pedro Sánchez.
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